¿Por qué necesitas Data Governance en la gestión de clientes?

Cada vez más los clientes esperan experiencias hiperpersonalizadas con las marcas, y para ello la información que tengamos de ellos es la clave. Ahora, ¿Cómo garantizarles la privacidad y confidencialidad de sus datos? 

El data governance implica la gestión de la disponibilidad, usabilidad, integridad y seguridad de los datos. Un programa sólido de gobernanza incluye un cuerpo directivo o consejo, un conjunto definido de procedimientos y un plan para ejecutar esos procedimientos. Se debe combinar metodología con estrategia orientada al cliente para garantizar la seguridad de los datos a la vez que cumplir con las expectativas de nuestros consumidores. Cada programa de data governance debe adaptarse a la gestión de clientes de la empresa en la que se debe implantar. Los beneficios de hacerlo son importantes.

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3 formas en que el gobierno de datos te ayuda a optimizar la relación con el cliente

El data governance resulta esencial para la administración de clientes puesto que promueve la reducción de costos, aumenta la consistencia de la información y supone un factor decisivo a la hora de resolver problemas relacionados con el reporting o el análisis. Veamos tres maneras en que la gobernanza impacta en la estrategia comercial de las empresas:

• Menos costos y más ingresos. El ROI es, seguramente, la razón de más peso para invertir en el gobierno de datos. Éste reduce la duplicación de datos y disminuye considerablemente los esfuerzos de gestión de datos. Con datos de mejor calidad, las empresas también reducen la probabilidad de errores, logrando una mayor eficiencia en las operaciones, que reduce los costos. Esta nueva forma de trabajar permite adquirir una mayor comprensión de los clientes. Al ostentar un control firme sobre el modo en que se definen las métricas y un conocimiento más amplio sobre las exclusiones de marketing, los segmentos y los atributos derivados, como el valor de vida del cliente, hace posible optimizar las campañas de marketing, que logran generar mayores ingresos.

• Información más confiable. Garantizar la consistencia, confiabilidad y repetibilidad de los datos es una cuestión de control. En todo lo relativo al cliente, hace falta asegurar esa visión centralizada y única logrando una vista 360 que permite definir métricas consistentes en toda la organización. Esta coherencia supone la estandarización de la documentación y la desaparición de la confusión que conduce a la toma de decisiones erróneas. La gobernanza también garantiza la integridad de los datos para futuros cambios, que pueden incluir desafíos empresariales en evolución, tecnologías emergentes y nuevos flujos de datos.

• Menos problemas de análisis e informes. Es habitual que se ponga la tecnología en el punto de mira cuando hay confusión sobre el significado de los datos o falta de claridad en los informes. Sin embargo, en la mayoría de los casos las herramientas no son las culpables del desconcierto, sino que lo que sucede es que se está sufriendo algún tipo de problema de control de datos. La gobernanza permite aclarar significados, alinear la tecnología con metas específicas y garantizar la visión única, incluso cuando los datos proceden de fuentes dispares.

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Un gobierno de datos pobre incide directamente en la gestión comercial. La mala información bloquea el alcance y utilidad de las métricas e indicadores de rendimiento y reduce los esfuerzos de marketing, poniendo en riesgo, al mismo tiempo, la reputación del negocio.

Para optimizar las campañas y la experiencia de los clientes, hay que trabajar en la gobernanza de la información, puesto que es la única forma de preservar su consistencia, evitando la ineficiencia de las iniciativas de marketing y el fracaso comercial.

La gobernanza de datos es un paso importante para garantizar que el mensaje se comparta con las personas adecuadas, que no se dupliquen los registros y que el reporting tenga la precisión necesaria.