Todas las empresas tienen dificultades para acometer una gestión integral de la calidad de los datos. La mayoría utilizan sólo una fracción de la información disponible en la organización para obtener conocimiento que les sea útil a la hora de mejorar el rendimiento global de su negocio. Además, muchas veces no se dan cuenta del coste asociado que supone la presencia de datos mediocres, inexactos o inconsistentes.
La significativa cantidad de ingresos que se pierden debido a trabajar con información de mala calidad está obligando a las empresas a cambiar su estrategia de gestión de la calidad de los datos. La tendencia es pasar de hacer una limpieza y optimización de datos de vez en cuando, a enfocarlo como una gestión integral de la calidad de los datos realizada de forma continua. Se trata de un proceso de mejora continua de la calidad, que abarca todos los niveles de la organización.
Veamos alguna de las mejores prácticas que se pueden utilizar.
Cómo aumentar la eficiencia de la gestión integral de la calidad de los datos
Existen 4 formas muy efectivas de avanzar hacia un enfoque de gestión integral de la calidad de los datos. Son las siguientes:
1. Encarga o haz una Evaluación de la Calidad de Datos
La forma correcta de comenzar a abordar los problemas de gestión integral de la calidad de los datos es mediante la realización de un análisis completo de la situación actual de tus datos.
Debes conocer qué tipo de Información contiene errores o inconsistencias. Saber si tienes datos duplicados o campos que faltan a menudo. Puede que todo esto no sea fácil de identificar y corregir, ya que los datos podrían estar ya en las copias de seguridad, o también podría tratarse de datos que se reciben de fuentes externas tales como:
- Proveedores.
- Aplicaciones externas.
- Medios sociales, como Facebook y Twitter.
2. Construye un Firewall de Calidad de Datos
Los datos de tu organización son un activo que contiene información estratégica y deben ser tratados como tal. Al igual que cualquier otro activo de la empresa, los datos contenidos en los sistemas de información de la organización tiene valor financiero. El valor de los datos aumenta y se correlaciona con el número de personas que son capaces de hacer uso de ellos.
Si dejamos que continuamente aparezcan datos inexactos, no sólo será más difícil obtener ideas de negocio válidas para toma de decisiones, sino que también se acabarán por estropear los datos de calidad.
Un firewall virtual de calidad de datos detecta y bloquea los datos malos justo cuando están entrando en nuestro sistema, actuando de manera proactiva para prevenir que esos datos de mala calidad contaminen las fuentes de información de la empresa.
Una solución de gestión integral de la calidad de los datos debe incluir un firewall de calidad de datos que identifique de forma dinámica los datos inválidos o corruptos.
Tal vez te interese leer:
Data quality: la importancia de la calidad en las empresas
3. Unifica Gestión de Datos y Business Intelligence
El gran volumen de datos que fluye a través de los sistemas de la empresa puede hacer que sea especialmente difícil mantener la calidad de datos máxima en todo momento. La clave del éxito está en identificar y priorizar el tipo y volumen de datos que queremos gestionar.
El Business Intelligence (BI) permite a las organizaciones determinar qué conjuntos de datos son más susceptibles de ser utilizados. Éstos serán, por lo tanto, a los que deba enfocarse de forma prioritaria el plan de gestión de la calidad.
4. Crea un grupo de trabajo encargado de gestionar la calidad de los datos
El objetivo principal de crear un grupo de trabajo encargado de la calidad de los datos es mitigar los riesgos que pueden surgir en el proceso de toma de decisiones que se lleva a cabo cuando se analizan y tratan datos de alto valor empresarial.
Formar este grupo es esencial en un planteamiento holístico como es la gestión integral de la calidad de los datos, y debe incluir tanto usuarios de negocio como personal del departamento de IT. El grupo será responsable de establecer las políticas y estándares de datos, asegurando que existe un mecanismo para resolver todas las cuestiones relacionadas con los datos que puedan surgir.
Deben también facilitar y hacer cumplir los procedimientos de mejora de calidad de datos que se vayan poniendo en marcha y deben promover medidas para evitar problemas relacionados con los datos antes de que ocurran.
Una gestión integral de la calidad de datos exitosa comienza con una estrategia de gestión de datos sólida y bien definida, basada en la selección e implementación de una buena solución de data quality y en la creación de equipos de integridad de datos, que constan de una combinación de personal de IT y usuarios de negocio.