Inteligencia Artificial al servicio de la gestión de datos eficaz

La transformación digital y su aplicación acelerada en los últimos tiempos plantea un cambio de paradigma y una revolución en la forma de hacer las cosas. En lo que respecta a la gestión de datos, la Inteligencia Artificial (IA) tiene un papel protagónico. ¿Cuáles son sus beneficios y cómo realizar una adopción virtuosa?

Gestión de grandes volúmenes de datos

Cada año, la cantidad de datos producidos se duplica y con ella el interés por comprender e interpretar la información generada. Independientemente del tamaño de la empresa, el análisis desempeña un papel esencial para la toma de decisiones data-driven.

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Sin embargo, administrarlos puede ser complejo. Cualquier organización que trabaje con Big Data y dispositivos de IoT sabe que procesar, almacenar y dar sentido a la información es una tarea de grandes dimensiones. Afortunadamente, la IA ha llegado al mundo de la gestión de datos, permitiendo un acceso en tiempo real y siempre disponible, a herramientas que permiten un análisis rápido.

La integración del Machine Learning, por ejemplo, brinda una mayor automatización de las tareas relacionadas con la información, como el almacenamiento, clasificación, extracción e interpretación de datos, optimizando la eficacia de todos los flujos de trabajo.

Aplicaciones de la Inteligencia Artificial para Data Management

Desde la catalogación de datos hasta su comprensión, la Inteligencia Artificial ofrece interesantes oportunidades para gestionar grandes volúmenes de información. Estas son las principales ventajas:

1. Automatización del proceso de datos: la IA y el Deep Learning (aprendizaje profundo) permiten automatizar todas las tareas rutinarias relacionadas con los datos, como su integración y administración. Los datos pueden ser ordenados automáticamente según numerosos parámetros, eliminando la necesidad de revisarlos manualmente.
   
   
2. Verificar la calidad de la información: la IA también permite comprobar problemas de calidad o inconsistencias en los mismos e implementar correcciones o marcar los errores a revisar por parte de los equipos técnicos. Esta tecnología se convierte en un sistema eficaz de control de calidad, con el objetivo de que los sistemas analíticos sean capaces de sacar conclusiones fiables que ayuden en la toma de decisiones corporativas.
   
   
3. Integración de datos heredados: aún existe una gran cantidad de información no digitalizada o en formatos sin conexión, almacenada en plataformas de gestión tradicionales. La IA permite rescatar estos datos y hacerlos accesibles, mediante su conversión en formatos legibles por los sistemas y almacenamiento en la nube para su posterior procesamiento.
   
   
4. Desarrollar reglas para la gestión automatizada de datos: saber qué información almacenar y cuál descartar es un problema muy recurrente en las tareas de gestión de cualquier negocio. La IA ayuda a tomar estas decisiones, analizando los patrones de uso de datos y recomendando las estrategias óptimas para su administración y almacenamiento.

Todas aquellas organizaciones que cuenten con grandes volúmenes de información están adoptando la Inteligencia Artificial como una herramienta clave para gestionar sus datos. Esta tecnología les permitirá maximizar el uso y disponibilidad de los datos para predecir escenarios, tomar decisiones en tiempo real, minimizar las fallas o errores e incluso lograr monetizar los datos en una economía de datos cada vez más competitiva.

¿Está tu negocio listo para entrar en el mundo de la IA para sacarle todavía más provecho a los datos?