Desde el momento en que las organizaciones comenzaron a ser data driven, es decir, guiarse por el uso intensivo de los datos que genera la propia operación, fueron perfilándose diferentes roles: analistas, ingenieros, cientistas (licenciados en la Ciencia de Datos) y directores. ¿Cuáles son los desafíos para los CDOs (chief data officers) según las predicciones 2023 y lo que estamos viendo recientemente?
Con la difusión de un sinnúmero de tecnologías para recolectar, centralizar, proteger, analizar, compartir y monetizar datos, la transformación digital gira en torno a esa información y, por ende, pone en un lugar de máxima centralidad a quien gobierna toda esa gestión de datos.
De acuerdo con una encuesta realizada por la escuela de negocios de Melbourn (Estados Unidos) a más de 400 empresas, las compañías que son más eficientes en el análisis y la monetización de los datos generan un 60% más de beneficios que aquellas que aún no avanzaron en este sentido. Fuente: Fortune Business Insights |
Sunny Bedi, CIO de Snowflake, sostiene que en niveles gerenciales se está revalorizando cada día más el rol de los directores de datos; no obstante, resalta la importancia de que estos ejecutivos tengan una actitud proactiva frente a sus colegas para mostrarles el valor de utilizar datos y lograr lo que era impensado hasta hace poco tiempo atrás.
Por otra parte, es evidente que todo lo que está sucediendo en el mundo de los datos impulsa y acelera la superación de la era en que existían silos de información. Los data lakes habilitan el almacenamiento virtualmente centralizado para acceder y democratizar datos, habilitando nuevas experiencias de usuario y oportunidades de negocios.
Precisamente, la monetización de datos está destinada a tomar un gran protagonismo. Superada la etapa de disponibilizar datos para iniciativas centrales del negocio y de capacitar al personal para que pueda sacar el máximo provecho de los datos, las modernas tecnologías de colaboración e intercambio de datos sustentan la viabilidad de transformarlos en una fuente más de ingresos en un escenario de data-economy.
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Las tendencias en gestión de datos de empresas data-forward indican la preferencia de los especialistas a trabajar con plataformas en la nube unificadas que incluyen todas las funcionalidades necesarias para las tareas propias de la ciencia de datos y el machine learning. Esto permite tener al alcance de la mano las capacidades para clasificar, realizar el control de acceso basado en roles (RBAC), catalogar, curar (trabajar en la calidad) y gestionar la disponibilidad de los datos, todo en un solo entorno.
Por otro lado, así como crece la idea de que cualquier profesional debería empezar a considerar el aprendizaje de la programación, los expertos en inteligencia de negocios (business intelligence - BI), deben considerar aprender algo de Python o de otros lenguajes, ya que necesitan tener la capacidad de autoabastecerse de las soluciones que resuelvan las muy diversas búsquedas de información que pueden llegar a necesitar para saber qué está pasando, por qué está sucediendo y qué se puede o se debe hacer.
Identificar entornos para un rápido desarrollo de aplicaciones data-driven en la nube le permitirá a las organizaciones crear sus propias aplicaciones de línea de negocios (LOB) e, incluso comercializar esas aplicaciones y monetizar esos desarrollos. De esta forma se reinventa el modelo de software como servicio (SaaS).
La ciencia de datos debe estar también en el radar, incluso, dentro de cada departamento o área de la organización, especialmente considerando la tendencia a trabajar con modelos predictivos y prescriptivos para manejar grandes volúmenes de información.
Finalmente, la premisa de “use lo que compre, pero compre sólo lo que necesita”, va de la mano de la exigencia que pesa sobre los ejecutivos -incluyendo a los CDO- de rentabilizar las inversiones lo más concreta y eficazmente posible. El modelo de negocios de SaaS, plataformas en la nube y desarrollo basado en lo que se utiliza o consume, es clave para hacer más eficiente a las organizaciones.
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Con todas estas orientaciones, vinculadas a las tendencias que se vislumbran para el futuro próximo, los directores de datos tendrán un apasionante horizonte de trabajo, proyección laboral y desafíos por superar.
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