Al adoptar la nube como parte de una estrategia integral de la transformación digital, las empresas suman una serie de beneficios contundentes. A nivel de los costos, las ventajas son palpables: está comprobado que contratar servicios Cloud resulta mucho más barato que tener una infraestructura de IT y disponer de servidores propios. Además, en los entornos de nube la actualización, tanto del software como del hardware, queda a cargo del proveedor del servicio, con lo cual las empresas también se desligan de ese otro costo. Y, encima, acceden a la tecnología de punta que suelen utilizar los Cloud service providers –que de hecho ofrecen soluciones cada vez más sofisticadas, como los servicios de big data y machine learning.
Ahora bien: veamos todas las ventajas de escalar en la nube, paso a paso.
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Las ventajas y desventajas del almacenamiento en la nube han sido debatidas largo y tendido. La realidad es que, más allá de las dudas iniciales sobre la seguridad, hoy está claro que en lo que hace al almacenamiento y los backups, las empresas que migran a entornos Cloud se garantizan de tener la información en un sitio seguro y con respaldo. Además, al disponer de los archivos en la nube, sus empleados y colaboradores pueden acceder a los mismos desde cualquier lugar y en cualquier momento, desde cualquier dispositivo prácticamente, lo que otorga un nivel de flexibilidad superior y favorece el trabajo colaborativo.
Se estima que la nube permite reducir costos generales de TI en un 30 a 40%. Además, ayuda a escalar los procesos de TI según sea necesario, optimizando el uso de activos tecnológicos. Otra de las ventajas del Cloud computing es que habilita a las empresas a responder rápidamente ante los cambios, a satisfacer las demandas cambiantes de los clientes y a llevar nuevos productos o servicios al mercado de manera veloz.
Adopción en masa
A nivel corporativo, hoy ya queda poca gente que pregunte qué es y cómo funciona la informática en la nube, qué es un servidor en la nube o qué es la nube de almacenamiento. Estas eran preguntas típicas del estadio inicial del Cloud computing. Hoy, es más frecuente que los ejecutivos consulten cuestiones mucho más específicas, como por ejemplo cuáles son las tendencias en la nube para este año, qué hacen las empresas similares para sacar el mejor provecho.
Lo anterior indica que la mayoría de las empresas ya interpretó las ventajas que trae consigo el paradigma Cloud y también comprendió que las mismas superan con creces a las eventuales desventajas que pudiera tener. Según un informe de McKinsey, los principales impulsores de la adopción eran la escalabilidad (75%) y la agilidad empresarial (72%). Otro motivo importante eran los menores costos (44%).
Los analistas explicaron que la adopción de estos servicios crece rápidamente a medida que las empresas (especialmente de servicios profesionales, telecomunicaciones y venta minorista) optan por el modelo de software como servicio (SaaS) e infraestructura como servicio (IaaS) para mejorar la experiencia del cliente y sus iniciativas de transformación digital (DX).
Escalabilidad, bendito tesoro
Una de las principales ventajas que presenta el hecho de tener plataformas y herramientas en la nube es que, cuando el negocio escala o crece, la evolución es más sencilla y hasta más barata que si hubiese que modificar sistemas on-premise. ¿Por qué razón? Porque el entorno de Cloud computing se puede escalar a pedido, pudiéndose manejar recursos crecientes o decrecientes en función de las necesidades de la compañía de cada momento y de sus demandas comerciales. Es decir: cuando una de las aplicaciones o servicios de la empresa experimenta un aumento o una caída en el uso, es posible aprovisionar dinámicamente el entorno de Cloud technology para escalarla o reducirla al instante.
La escalabilidad es la capacidad de sumar o restar fácilmente recursos de cómputo o de almacenamiento. Cuando estos recursos no son suficientes, primero se presentan problemas de rendimiento, y luego los usuarios comienzan a tener problemas para operar, cosa que finalmente hace que la empresa pierda ingresos. Pero claro, como los recursos no son gratuitos, excederse en el aprovisionamiento también puede incrementar desmedidamente e innecesariamente los costos de TI.
Administrar correctamente el escalado –en función de los propios patrones de uso históricos- resulta clave para garantizar que siempre se disponga de suficientes recursos, sin sobreaprovisionar ni desperdiciar el presupuesto.
Hoy, los negocios necesitan desarrollar la capacidad de adaptarse a los cambios, crecer y ser resilientes. Por lo tanto, tienen que prepararse, a fin de cuentas, para escalar una y otra vez.
La nube revolucionó la forma y la velocidad en que se pueden mover y asignar recursos informáticos. Y de tal suerte, permite satisfacer dinámicamente las demandas del negocio, ofreciendo lo que hoy todas las empresas buscan: flexibilidad y agilidad.