La integración de datos e información diversa ayuda a mejorar su gestión para que resulten precisos y coherentes y también a administrarlos de un modo estratégico con el fin de conseguir un mayor rendimiento y competitividad.
Sin embargo, en la práctica pueden llevarse a cabo cruces de datos propios con información externa sin necesidad de llegar a integrarla. Es el caso de los proyectos que llevan a cabo las entidades financieras para localizar morosos o, por ejemplo, aquellos otros que persiguen el fraude en los seguros obteniendo beneficios ilegítimos.
En este tipo de proyectos se procede a cruzar los datos externos procedentes de diversas fuentes, pero sin llegar a integrarlos con los de la organización (vídeos, fotos, textos publicados en redes sociales, foros o blogs, datos públicos como los publicados en el BOE, entre otros), con los datos propios de la organización. De este modo, se consigue ganar en eficacia operativa y en rentabilidad.
La integración de los datos que se lleva a cabo mediante procesos de ETL diseñados a partir de una serie de unas reglas que se establecerán en función de las necesidades y filosofía de la empresa. Es de este modo, llevando a cabo procesos de calidad y coherencia de los distintos tipos de datos de que disponemos, cómo la integración de la información nos permite obtener una ventaja estratégica que se deriva de ese mayor control de la información tan necesario para su optimización y gestión al servicio de los objetivos de la empresa, garantizando también el cumplimiento de la normativa vigente.
La integración, por lo tanto, nos permite ordenar, centralizar y proteger los datos, transformando la información en datos fiables, idóneos para su uso en la gestión de procesos y decisiones para la mejora de productos, servicios y, en suma, con el objetivo poder tomar mejores decisiones. Es así como convertimos los datos en un activo estratétigo para la organización.
En el contexto actual, como es bien sabido, los datos pueden proceder de fuentes distintas, ser datos estructurados, semiestructurados o no estructurados, y estar almacenados en entornos virtuales, bases de datos relacionales o en un clúster de Hadoop, pongamos por caso.
En este sentido, la integración de distintos sistemas que contienen datos e información heterogénea permite proteger los datos con mayor eficacia, mejorar la seguridad y garantizar el cumplimiento de la legalidad vigente.
Además de establecer una serie de reglas para el gobierno de la información, la integración de los datos y de infraestructura a utilizar, también ha de tenerse en cuenta la seguridad y, en este sentido, una información integrada ayuda a una mayor seguridad.
Cuando se exporta información a la nube la seguridad de los datos es una exigencia prioritaria, pues hay datos sensibles (datos personales y otros datos de carácter crítico) que es obligatorio subirlos enmascarados o encriptados, dependiendo de las necesidades y del tipo de datos de que se trate. En otro caso, incumpliríamos la normativa.
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