La integridad de un dato alude a ese atributo o cualidad que es inherente a la información cuando se considera exacta, completa, homogénea, sólida y coherente con la intención de los creadores de los datos que la conforman.
Esta cualidad, que va ligada al propio dato y no al lugar donde se almacena, al contrario de lo que sostienen creencias bastante extendidas; se obtiene cuando se impide eficazmente que el contenido de una base de datos, de un proceso o de un sistema se vea, accidental o intencionalmente:
- Modificado, en base a su propio contenido o con ayuda de la inserción de nuevo.
- Destruido total o parcialmente.
En Powerdata empleamos herramientas enfocadas a validar los atributos del dato, especialmente en lo que concierne a su calidad, abordando cada uno como un todo, es decir, como un dato exacto, completo y homogéneo.
La importancia de la integridad de los datos
La integridad de los datos tiene un carácter decisivo en cualquier organización, el sector a que se dediquen e incluso su tamaño son indiferentes a la hora de considerar este asunto y ello se puede ilustrar con sencillos ejemplos que representan situaciones comunes:
- Administración de medicamentos en un hospital: cualquier modificación en los registros electrónicos del tratamiento de un paciente podría tener gravísimas consecuencias para su salud si, por ejemplo, se multiplica o reduce la dosis, al cambiar alguna de las cifras de la dosis diaria que éste necesita de un determinado medicamento.
- Gestión de incentivos desde el Departamento de Recursos Humanos: modificar o eliminar datos dentro de la información de nóminas puede conllevar a un impago o a practicar un cómputo inexacto que no coincida con las condiciones negociadas con el trabajador.
- Elaboración de un reporte gerencial: si se carece de la integridad necesaria entre sistemas, esta falta de integridad afectará a sus relaciones, en primer lugar, lo que provocará que el reporting no pueda beneficiarse de la inteligencia de negocio y no sea, en ningún caso, fidedigno ni válido; situación que podría materializarse en la existencia de fallos al cruzar el total de las ventas con el stock en almacén.
Lo fundamental es pues, no sólo garantizar la integridad de los datos, sino tener la capacidad de descubrir si algo falla, pudiendo detectar anomalías a tiempo. De eso nos ocupamos en Powerdata, cuando validamos los atributos de calidad para posicionar el nivel donde se encuentra cada empresa en cuanto a la calidad del dato, asegurando ese margen de reacción que en tantas ocasiones resulta decisivo.
Tal vez te interese leer:
Data y Analytics: la mejor respuesta para enfrentar la crisis
Seguridad de los datos, de la protección a la integridad referencial
Además, a la hora de hablar de la importancia de la integridad de los datos, no puede pasarse por alto que este atributo de la información es uno de los componentes fundamentales de su seguridad. La protección ha de ser exquisita, especialmente cuando escalamos en nivel de criticidad y también cuando hablamos de datos que se exportan a ambientes externos a la empresa.
Este aspecto debe cuidarse aún más cuando el dato se exporta a ambientes externos a la organización. El ejemplo más común sería el outsourcing, que es por definición un ambiente vulnerable para la seguridad de la información y que, si se descuida puede afectar:
- A la imagen de la empresa.
- Al volumen de negocio.
- Podría acarrear consecuencias legales.
- En último término, afectaría también a la gestión interna.
No podemos dejar de mencionar otra faceta del concepto de seguridad de la información, que es la que tiene que ver con la referencia. La integridad referencial se apoya en la tecnología necesaria para proteger la información sensible, aplicando procesos de enmascarado, por ejemplo, en los que, además de cambiar el valor real de los datos es necesario mantener esa integridad entre ellos.
Procurar que el enmascaramiento de datos haga posible que éstos puedan utilizarse sin que sean realistas, convirtiéndolos en un conjunto de datos completamente íntegros pero que no tienen cercanía a la realidad, es fundamental tanto en simulaciones como en ambientes productivos o de desarrollo, donde la protección de la información no puede resentir la integridad.