Los conceptos tecnológicos siguen cubriendo todos los aspectos del día a día de los negocios y en general la tecnología se ocupa de lograr que cualquier tipo de empresa progrese de forma sólida. El data enrichment es algo a lo cual ya nos hemos habituado y que está obteniendo cada vez una mayor relevancia, pero es importante entenderlo perfectamente para asimilarlo.
Tal y como su nombre indica, siempre que hagamos referencia a este concepto estaremos hablando del enriquecimiento de datos o lo que es lo mismo, los procesos que se llevan a cabo en un determinado momento para poder mejorar los datos que se manejan sin necesidad de ser procesados. A partir del Data Enrichment los datos que se obtienen van a convertirse en activos más valiosos para cualquier empresa o negocio que se precie.
¿De verdad nos conviene tanto aprovecharnos del enriquecimiento de datos en nuestro negocio? Cuando hacemos uso de este proceso obtenemos datos más precisos, nos aseguramos de que los datos esenciales quedan pulidos y sin ningún tipo de deficiencia, ayudando esto a incrementar el rendimiento. Los beneficios de hacerlo, nos pueden llevar tanto a tener un mayor volumen de efectividad dentro de nuestro negocio hasta a poder dar salida a nuevas ideas de marketing con las que potenciar los resultados de la entidad. Al hacerlo, aprendemos de nuestros clientes y obtenemos una posición privilegiada para extendernos en el mercado.
Lo que entendemos gracias al enriquecimiento de los datos es que es muy importante trabajar con datos de calidad que sean correctos y que nos aporten exactamente lo que necesitamos. Usando fuentes de calidad que nos proporcionen buenos proveedores y analizando esta información con precisión, nos posicionaremos de forma muy sólida. Para alcanzar estos resultados primero tenemos que cumplir con dos requisitos lógicos, pero que en algunos casos quedan olvidados. El primero de ellos es realizar una verificación previa de los datos. No queremos trabajar con datos de poca calidad ¿verdad? Así mismo, y como segundo aspecto, hay que entender los motivos por los que estamos pasando por el proceso de enriquecer los datos. ¿Sabemos lo que implica y lo que nos puede proporcionar su resultado? Solo así obtendremos realmente el impacto más positivo en nuestro negocio.
Cuando definamos un objetivo del enriquecimiento, sea cual sea, estaremos poniendo rumbo hacia la obtención de una mejora de rendimiento que nos abrirá muchas puertas en términos corporativos. La planificación previa siempre es vital y es lo que garantizará el éxito del proceso, dándonos una visión integral de toda la operación y llevándonos hacia donde de verdad queremos dirigirnos.
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Trabajamos, como hemos dicho, con la regla de que la información adecuada es la más importante dentro de cualquier negocio. Los malos datos se tienen que apartar y olvidar, porque solo terminarán dando problemas. En contraposición a esto, unos datos correctos cambian todo el organigrama de nuestro negocio y nos dan lo que necesitamos. Tal y como trabajar con datos incorrectos produce una desastrosa serie de consecuencias, hacerlo con los correctos nos lleva de manera exitosa hacia un resultado positivo. Y eso significa, ahorrar dinero, afinar el tiempo que invertiremos en los procesos y poder redirigir todos los recursos ahorrados a otras estrategias e iniciativas.
Seremos más ágiles en nuestro día a día, evitaremos caer en malas prácticas que nos lleven a listas negras, aumentaremos el volumen de retorno por la inversión que hagamos en marketing y solucionaremos problemas con mayor dinamismo. También podremos segmentar a nuestra base de datos de clientes y personalizar el acercamiento que le ofrecemos a cada uno para que la respuesta por su parte sea más positiva. Además, el análisis de los clientes se podrá realizar a unos niveles más profundos, consiguiendo datos más concretos con los que trabajar eficientemente que nos den la capacidad para tener un mayor control de cada uno.