El Valor de la Gestión de Datos

Arquitectura en la nube, tendencias en la nueva normalidad

Escrito por Redacción PowerData | 30/10/20 12:00

No es novedad que la nube está adquiriendo un gran protagonismo especialmente durante la crisis sanitaria mundial desatada por la pandemia del COVID-19. De hecho, a medida que una nueva normalidad se va forjando, cloud-first parece ser más la regla que la excepción. 

¿Pero qué hace tan fundamental esta tecnología? ¿Qué significa y qué debemos saber para aprovecharla en nuestro negocio? 

 

Las organizaciones en el mundo gastaron $107 mil millones de USD en infraestructura en la nube como servicio en el 2019, un 37% superior al año anterior. Y ya antes de la pandemia las empresas mostraban un aumento en las ventas de cloud computing

Fuente: Canalys

 

5 claves a tener en cuenta

1. La arquitectura en la nube: “un todo”. La  arquitectura en la nube no solo concentra las características propias de los sistemas proporcionados por Rackspace, Azure o AWS, sino que va más allá para dar respuestas a todos los desafíos con los que se encuentran los especialistas de los departamentos informáticos. La nube ha dado paso a una nueva arquitectura corporativa en la cual el entorno interno solo es una pieza más de todo lo que hay que gestionar de una manera conveniente.

2. No hay una sola nube. Las empresas no se pueden habituar a pensar que con la adopción de unos recursos en nube ya tienen el trabajo hecho, dado que siempre se pueden tener nuevas necesidades. Algunas de ellas nacen como respuesta a la introducción de nueva tecnología en la nube aportada por proveedores como Google o AWS. El catálogo de servicios en la nube que exprime una empresa siempre está en crecimiento y se encuentra abierto a nuevas posibilidades.

3. ¿Cómo hacernos arquitectos de la nube? A pesar de que la arquitectura de la nube es la que marca las pautas hoy en día, no vamos a poder ser arquitectos de la Cloud sin que de forma previa no seamos arquitectos de la Tecnología de la Información. Es decir, en el caso de que hayamos elegido ser arquitectos de AWS (que es uno de los soportes más generalizados), vamos a tener que entender a la perfección conceptos sobre redes, tecnologías, escritorios virtuales, accesos… y muchas cosas más.

4. La rapidez y escalabilidad de la nube. Una de las principales características destacables de la nube es que nos permite trabajar con gran rapidez, dar respuesta a procesos en cuestión de minutos y escalar de acuerdo a las necesidades que se vayan planteando. Esto permite que cualquier tipo de negocio mejore y pueda optimizar su trabajo. Y veremos más adelante que en un escenario como el actual todavía se valora más.

5. No es solo una mera infraestructura. Tenemos que dejar de pensar en la nube como una infraestructura exclusivamente. Las capacidades que presenta la nube representan activos de nuestra compañía y ya no se puede administrar en grupos individuales, sino que todos los miembros del negocio deben tener la oportunidad de beneficiarse de ello.

 

 

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Tendencias en la era post-pandemia

Frente a la pandemia, hay empresas que han decidido esperar, otras que están reforzando sus gastos en TI para prepararse para cuando la crisis pase y un tercer grupo sigue operando como siempre.

Ahora bien, de a poco se van forjando algunas tendencias en cuanto a la infraestructura en la nube que ninguna puede ignorar.

  • Serverless everything. La ausencia de servidores se convierte en una idea muy tentadora en el escenario post-pandemia por la velocidad de despliegue, la velocidad de cambio, lo que significa que se puede crear una arquitectura resiliente y lista para el cambio.
  • Seguridad federada. Considerando el surgimiento de nuevas crisis, tener una seguridad federada, es decir gestión centralizada de la seguridad de recursos distribuidos, comienza a ser el abordaje correcto para estar preparado y adaptarse frente a una oportunidad o una crisis.

  • Contenedores distribuidos. Nos referimos a la federación de contenedores que corren solos o en clusters, con la capacidad de manejarlos desde cualquier lado, en la nube o no. De nuevo prevalece la flexibilidad para adaptarse al cambio y/o a futuros problemas. 

 

 

La infraestructura en la nube plantea grandes oportunidades para los negocios, especialmente ahora, que sabemos que por ejemplo los recursos humanos pueden necesitar trabajar 100% remoto debido a una crisis sanitaria.

La necesidad de resiliencia, flexibilidad, escalabilidad y eficiencia ocupa las agendas de todas las empresas dispuestas a salir adelante de esta crisis y que la próxima las encuentre preparadas.