Hoy en día los datos son el principal activo de las organizaciones y el gran volúmen que circula al interior de ellas y por fuera plantea oportunidades y desafíos en aspectos como costos, almacenamiento y posibilidades de expansión.
La migración a la nube puede ayudar en la gestión de los datos y aplicaciones aportando la escalabilidad y flexibilidad necesaria para respaldar el crecimiento. ¿De qué se trata este proceso que se convirtió en la regla antes que la excepción en las organizaciones de diversos tamaños y sectores? ¿Qué ventajas ofrece y cuáles son las consideraciones principales para emprender el traspaso a la nube?
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En todas las estrategias de implementación para aplicaciones y cargas de trabajo, el 47% de las organizaciones siguen una estrategia que da prioridad a la nube mediante la implementación de nuevas aplicaciones utilizando servicios de nube pública.
Fuente: Google Cloud
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¿Qué es la migración a la nube?
La migración a la nube consiste en la transición de las aplicaciones empresariales tradicionales a un entorno de nube, ya sea pública, privada o un entorno híbrido de varias nubes.
- Nubes públicas: se ejecutan mediante proveedores de servicios en la nube externos. Ofrecen recursos de procesamiento, almacenamiento y red a través de Internet, lo que permite que las empresas accedan a recursos compartidos bajo demanda en función de sus requisitos y objetivos comerciales únicos.
- Nubes privadas: las compila, administra y posee una sola organización y se alojan de forma privada en sus propios centros de datos locales. Proporcionan mayor control, seguridad y administración de datos, permitiendo que los usuarios se beneficien de un conjunto compartido de recursos de procesamiento, almacenamiento y red.
- Nubes híbridas: combinan modelos de nube pública y privada posibilitando que las empresas puedan aprovechar los servicios de nube pública y mantener las capacidades de seguridad y cumplimiento que suelen encontrarse en las arquitecturas de nube privada.
De esta forma, se elimina la necesidad de que las empresas obtengan, configuren o administren recursos por su cuenta pagando únicamente por lo que usan. Existen tres tipos de modelos de servicio de computación en la nube:
- La infraestructura como servicio que pone a disposición servicios de procesamiento y almacenamiento.
- La plataforma como servicio que ofrece un entorno de desarrollo y de implementación para compilar en la nube.
- El software como servicio que proporciona apps como servicios.
Las ventajas de la migración a la nube
La migración a un entorno de cloud permite acelerar la prestación de nuevos servicios y ganar flexibilidad con recursos a pedido. A su vez ofrece escalabilidad, recuperación y accesibilidad, además de la posibilidad de reducir el costo total de propiedad.
Entre las ventajas principales se destacan:
- Recursos flexibles y escalables en un contexto de necesidad de recursos fluctuante de acuerdo a las demandas del negocio.
- Mayor control de los costos con la capacidad de equilibrar el gasto de capital y el gasto operativo.
- Mejor prevención y recuperación ante incidentes gracias a la combinación de copias de seguridad de datos disponibles y datos recuperados.
- Mayor accesibilidad a los datos y a las aplicaciones en cualquier momento y lugar.
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Entre las razones principales para migrar cargas de trabajo a la nube, destacan la flexibilidad y escalabilidad (62%) y una mayor gestión de costos mediante el aprovisionamiento elástico de recursos (47%), según una encuesta a ejecutivos de TI.
Fuente: Cloudzero
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¿Qué tener en consideración antes y durante el proceso de migración a la nube?
Antes de realizar la migración a la nube, es crucial definir de antemano una serie de cuestiones para que el proceso se ejecute de la forma más ordenada y eficiente posible:
- Definir objetivos: lograr un consenso entre todas las partes involucradas con lo que el entorno de nube debe lograr en términos de administración de costos, accesibilidad de datos y seguridad.
- Evaluar cargas de trabajo: realizar un balance de datos y aplicaciones e identificar los requisitos relacionados con la privacidad o la calidad del servicio.
- Planificar la migración: seleccionar un modelo de implementación y a los proveedores del servicio.
- Monitoreo y optimización: evaluar el desempeño y decidir cuándo realizar cambios o mejoras de infraestructura.
Luego hay un conjunto de consideraciones clave sobre el modelo de implementación, las ofertas de los proveedores de servicios en la nube y el costo:
- Contar con una herramienta de descubrimiento diseñada para localizar todos los dispositivos de la red local puede ayudar a entender qué cargas de trabajo son más adecuadas para una nube pública y cuáles para una nube privada.
- Solicitar a un proveedor de servicios administrados u otro socio tecnológico permite explorar posibles escenarios sin necesidad de un compromiso con un proveedor de servicios en la nube. Esto ayuda a determinar cuáles son los proveedores que tienen más probabilidades de proporcionar los servicios que la empresa necesita.
- En colaboración con los equipos o asesores, es recomendable evaluar el precio por desempeño entre los proveedores de la nube.
- Administrar una forma de seleccionar y deseleccionar servicios específicos. Esto ayuda a los equipos de TI a establecer políticas de flujo de trabajo y automatización coherentes.
- Establecer políticas internas para garantizar el cumplimiento de las normativas de privacidad de datos.
- Evaluar el desempeño de las aplicaciones clave posibilita la planificación de los esfuerzos de modernización de TI y la adopción de nuevas tecnologías como contenedores.
En suma, la migración a la nube ofrece funcionalidades a las empresas y grandes ventajas en términos de costos, seguridad y escalabilidad, rasgos estratégicos para pensar en la expansión de los negocios.
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