Mejores prácticas para integrar datos en la nube de forma eficaz

Ya no se cuestiona el poder de los datos, tendencia que seguirá marcando el 2022 también. Ahora la cuestión pasa por datos... ¿pero cómo? ¿dónde? En ese sentido, la  integración de datos permite a las empresas lograr información accesible y confiable para que los usuarios puedan tomar decisiones informadas y al mismo tiempo puedan sortear los problemas de gestión a los que se enfrentan cuando los datos proceden de fuentes o sistemas dispares. Esto solo es posible con una visión 360 del negocio. Veamos cómo conseguirlo.

Una gestión de datos eficaz se convierte, entonces, en una prioridad para que la organización pueda extraer el valor de los datos y que pueda hacerlo en el momento y lugar requeridos por el usuario o usuarios autorizados.

Con la masiva migración cloud de los negocios muchas cosas han cambiado, y si bien las necesidades de integrar datos en la nube o en sistemas on-premise se han incrementado, así como su complejidad, la razón por la que se llevan a cabo los proyectos de integración siguen siendo las de siempre: lograr la integridad de la información para gestionar de un modo más eficaz los datos procedentes de orígenes diversos.

Quizás te interese seguir leyendo

Qué se entiende por integridad de los datos

La integridad, clave para satisfacer las necesidades de negocio

La eficacia en la gestión de los datos, que permite satisfacer necesidades de negocio, se traduce en rapidez y oportunidad de acceder fácilmente a los datos obtenidos gracias a la centralización y estandarización de los mismos. Esto se consigue cuando la información de calidad es entregada puntualmente al usuario para su uso. Desde un enfoque general, alcanzar este objetivo se traduce en la tan ansiada ventaja competitiva.

En la práctica, la eficacia que proporciona la integración de la información en un entorno cloud equivale a beneficiarse de una mayor eficiencia, a la que es posible llegar gracias a:

• Mayor agilidad.

• Ahorro de costes.

• Mejora de los procesos internos.

• Acceso a una ventajosa escalabilidad progresiva o adaptable a las necesidades de cada momento.

Se trata, en fin, de garantizar el acceso eficaz a una información de calidad, que responda a nuestras expectativas para así acceder a datos de inteligencia de negocios (BI) en y desde los distintos escenarios de integración de datos. Para llegar a ese punto es preciso adoptar una visión estratégica de la gestión de datos, coordinando el entorno SaaS y on-premise como un todo, y siempre buscando soluciones ad hoc.

Desde un enfoque global del entorno TI, la integración de datos en la nube será necesaria si buscamos un acceso rápido y confiable a datos críticos para la toma de decisiones. Dentro del nuevo panorama tecnológico y de las exigencias de acceso a información de calidad para los distintos actores de negocio, por lo tanto, la integración de datos en la nube se configura como una evolución natural para las empresas que quieran contar con un BI fiable y eficaz, capaz de dar respuesta a unos requerimientos cada vez más exigentes.

Sigue leyendo

¿Qué son los data fabrics y por qué son importantes de cara al 2022?

4 aspectos a tener en cuenta para ganar en eficacia al integrar datos en la nube

1. Integrar datos no es sinónimo de transportar datos

Cuando se habla de integrar datos en la nube se trata de convertir los datos en algo significativo y de confianza, que puede y debe estar perfectamente online a medida que se procesan los datos. Esto implica llevar a cabo acciones de perfilado de datos que ayuden a comprender la utilidad de los mismos, su condición, estructura, relevancia y relaciones, y también iniciativas de calidad de los datos, donde se incluirían la validación, el matching y la limpieza de datos.

2. Velar por la integridad de la información es necesario

Violar la integridad de una aplicación es demasiado fácil, especialmente en un entorno híbrido, si no se entienden bien las relaciones entre los objetos de datos. Una integración de datos efectiva requiere saber qué elementos son necesarios para asegurar una transacción completa de objetos de datos desde el contexto de la aplicación. Por ejemplo, un “objeto de pedido” está siempre relacionado con el “detalle del pedido" y esto habrá que tenerlo en cuenta al integrar datos en la nube.

3. Es preciso adoptar un enfoque de negocio

Una integración efectiva requiere un enfoque de negocio, no uno técnico. Los administradores de aplicaciones deben tener la capacidad de crear, administrar, reiniciar y realizar el seguimiento de las integraciones de forma fácil, sin necesidad de programación ni conocimiento profundo de scripts ni otras cuestiones puramente técnicas.

Lo que se necesita es una solución de integración que pueda comprender el esquema y los metadatos subyacentes de la aplicación en la nube. Los datos han de poder exponerse en términos de negocio, ya que esto permite a los usuarios de la organización acceder directamente a los datos que necesitan, cuando lo necesitan.

4. La seguridad híbrida puede considerarse como una prioridad

La seguridad es uno de los temas más importantes cuando hablamos de la nube. Pero independientemente de la nube, no se puede gestionar un negocio sin unas políticas de seguridad. No se debería nunca permitir que cualquier usuario pudiera iniciar consultas mediante API en los sistemas empresariales. En un mundo híbrido, es fundamental contar con una única capa de integración para recopilar datos de forma segura y para administrar quién puede consultar los datos y qué puede obtener.

La seguridad puede incorporarse en forma de agente seguro, enmascaramiento de datos (enmascaramiento dinámico de datos para seguridad basada en roles en entornos de producción, enmascaramiento pasivo de datos para privacidad de datos en cajas de seguridad de desarrollo) y soporte de estándares de seguridad avanzados.

La gestión de datos en la nube es una necesidad primordial para lograr una vista unificada del negocio y poder tomar decisiones informadas. Para ello quedó claro que las empresas necesitan lograr una integridad de datos de diversas fuentes y en diversos ambientes. No tomar medidas en esta dirección es como tener una mina de oro en nuestras narices y no explotarla.

¿Está tu negocio listo para aprovechar todo el valor de los datos?